Ser charlatán de verdad lleva implícito cargar una maleta de madera sujeta con una correa de cuero sin hebilla, atada con un nudo, de la que sólo él sabe cómo soltarlo.
Señoras y Señores.
Ha pasado el tiempo que marcan las normas plebiscitarias.
Volver a encontrarnos es siempre un gran placer a pesar de haber pasado un tiempo aletargado.
Soy consciente de que cogerán mis papeletas, porque mi oferta es la mejor, la única que tiene verdades y no fantasías.
Las mías tienen el mejor precio. ¿Cuántas quieren Ustedes?
Esperen que en un momento me colocaré en mi caja de madera. Creo que me verán bien en esta posición y suelto todo lo que llevo dentro.
Hay va mi oferta. No hay ninguna que la iguale.
Por una, bajo el IVA, que notarán de forma importante sobre todo en la cesta de la compra y todo lo relacionado con la cultura, la investigación y la creatividad.
Por dos, bajo IRPF. Sólo pagarán más los que tienen dinero en paraísos fiscales.
Por tres, bajo el paro y creo tres millones y medio de puestos de trabajo. Todas las personas con alguna discapacidad tendrán su puesto de trabajo entre la empresa privada y lo público.
Por cuatro, desaparecen los desahucios. Todos tendremos el derecho de tener una vivienda. Para ello se cambiarán las leyes que rigen los productos que ofrecen los sistemas financieros. Crearemos una red de Banca Pública por donde se gestionen todos los movimientos económicos del Estado Central, Autonomías, Ayuntamientos, etc.
Por cinco, desaparecen todos los intermediarios, agrícolas y de otros sectores, así tendrás un precio justo de todos los productos. Crearemos Cooperativas agrícolas coordinadas entre sí que permitan un trabajo en equipo adaptando en cada momento las nuevas tecnologías con unos costos más bajos.
Por seis, siempre la Sanidad será Pública y gratuita, las listas de espera quedarán reducidas a diez días. Para ello, convocaremos oposiciones de todos sectores de la Sanidad consiguiendo desaparezcan la incertidumbre de estar con contratos o interinos y aquellos que opositaron fuera de su localidad y tras largos años de espera podrán volver si lo desean a su lugar de origen. Desaparecerán todos los nombramientos de designación directa cubriéndose estos mediante oposición y mérito de sus capacidades demostradas en sus CV. Crearemos un centro farmacéutico centralizado y también centralización de todo el instrumental sanitario de nuevas tecnologías.
Por siete, la enseñanza cubrirá todas las necesidades para hacer un país culto. Esta será gratuita, incluidos los libros de texto, comedor y guarderías para los más pequeños, y los alumnos por aula serán un máximo de quince. Se aumentará el número de profesores y se crearán centros especializados de formación que se adapten en cada momento a la realidad del progreso de las ciencias y humanidades. Dotaremos a los enseñantes y alumnos de las nuevas tecnologías que ocuparán un interés importante en una mejor comprensión del aprendizaje. Crearemos una escuela de formación de empleados públicos donde sus capacidades se puedan enriquecer y con ello generaremos una mayor eficacia de todo lo público.
Por ocho, desaparecerán las carreteras de siempre y todo serán autopistas, totalmente gratuitas. La seguridad vial prevalecerá por encima de otros intereses. En los colegios se impartirán enseñanzas sobre la seguridad vial.
Por nueve, la Justicia será Universal y gratuita. Ésta se aplicará a los corruptos en un plazo no superior a 30 días. Desaparición del aforamiento, todos los españoles somos iguales. Para ello se convocarán plazas de Fiscales, Jueces, abogados de Oficio. Todos los puestos serán cubiertos por oposición. Desapareciendo cualquier otro sistema de nombramientos que se ha dado por razones diversas y que no se corresponden en una democracia avanzada.
Por diez, ningún joven quedará en el paro ni tendrá que emigrar y todos tendrán un salario suficiente. Les permitirá reflexionar sobre el presente y el futuro de su vida. Aprovechando su vitalidad y formación crearemos con ellos encuentros de aportación de ideas. También centros de investigación y desarrollo. Todos los que os habéis marchado fuera de nuestro país podréis volver y ocupar los puestos en la sociedad que por esfuerzo y méritos merecéis.
Por once, los jubilados verán incrementadas sus pensiones como si estuvieran trabajando. No tendréis que pagar ningún medicamento. Además para abaratar los fármacos aumentaremos la creación de centros de investigación de medicamentos. Tampoco os tendréis que preocupar cuando no podáis valeros por vosotros mismos ya que crearemos residencias para todos.
Por doce, las amas de casa que nunca han podido trabajar tendrán una pensión suficiente que les garantice una vida digna. Las viudas cobrarán el cien por cien de la pensión del marido.
Por trece… No acabo de entender por qué Ustedes no cogen papeletas. Será porque la caja de madera que tengo debajo de mi no es cuadrada sino más bien rectangular y no me han podido ver ni oír. Éste es mi error. Tenía que haber colocado una caja cuadrada y que brillase como el oro para dejarles a Ustedes deslumbrados. No obstante, pasada la fecha que me han autorizado para ofrecerles a Ustedes mis papeletas, quito el cajón, lo cierro con clavos, lo tiro al mar y que siga flotando por si cae en buenas manos y por si donde dije digo al mojarse la tinta de las papeletas queda emborronada y por lo tanto yo no he dicho nada.
Me he dejado muchos apartados sin nombrar, mis papeletas se encarecían y la impresora las ha recortado.
Ahora sólo me queda cambiar de oficio, Señoras y Señores. Tengo trajes a medida de telas y colores de todas clases y, no se preocupen, no son de fibra o lana, son de un nuevo material, se llama pelaje.
Quien te ha visto y quién te ve, charlatán de plaza, pueblos y ciudades. Si antes se te acababan las papeletas y ahora te has esfumado y dices que no has existido.
Tú, amigo charlatán, que ibas por calles, plazas y aldeas. Aglutinabas a tu alrededor gentes de buena fe, les hacías pasar un rato agradable y donde empezabas ofreciendo uno, dabas cinco por el mismo precio. Y lo más importante, hacías feliz a mucha gente. A ti te admiro. Me enseñaste el arte de conocer el pensamiento humano y como llegar a lo más profundo de los sentimientos, viendo en ti, cuando te retirabas, caer lágrimas de tus ojos que me decían que su contenido tenían años de historia del pensamiento humano.
Señoras y Señores, mis papeletas son éstas. Estoy seguro de que les he explicado mi camino.
Jesús Aznar (16-5-2015)